Aunque pocos lo sepan, esta compañía es sueca. Con sede en Palma de Mallorca y 100% capital escandinavo. Con un ERE de 1.100 personas para final de año. Con aviones de mayoria obsoleta ( md mc donells douglas 82/ y serie 90 ), de 15 años de antiguedad aunque le digan que tienen 9, porque esos son los años que tienen desde su compra. Estos aviones( con motores en el timón de cola), obligatoriamente se tienen que sustituir dentro de dos años...Muchas compañías lo han hecho, Spanair no tiene dinero....
Me irrita profundamente la imagen de un tropel de abogados tratando de encontrar la estrategia adecuada para liberar a los posibles implicados de su parte de responsabilidad.
Siempre pienso que en estos casos no puede excluirse la hipótesis de la mera fatalidad sin culpables. Porque, por tranquilizadora que nos resulte la idea, no siempre hay culpables para lo que sucede.
Pero, aun así, ¿cómo no tratar de minimizar al máximo el margen concedido a la fatalidad? Y me temo que la guerra comercial entre las compañías aéreas no favorece precisamente la deseable reducción de ese margen.
2 comentarios:
Aunque pocos lo sepan, esta compañía es sueca. Con sede en Palma de Mallorca y 100% capital escandinavo. Con un ERE de 1.100 personas para final de año. Con aviones de mayoria obsoleta ( md mc donells douglas 82/ y serie 90 ), de 15 años de antiguedad aunque le digan que tienen 9, porque esos son los años que tienen desde su compra. Estos aviones( con motores en el timón de cola), obligatoriamente se tienen que sustituir dentro de dos años...Muchas compañías lo han hecho, Spanair no tiene dinero....
Día negro, sin duda, el de anteayer.
Me irrita profundamente la imagen de un tropel de abogados tratando de encontrar la estrategia adecuada para liberar a los posibles implicados de su parte de responsabilidad.
Siempre pienso que en estos casos no puede excluirse la hipótesis de la mera fatalidad sin culpables. Porque, por tranquilizadora que nos resulte la idea, no siempre hay culpables para lo que sucede.
Pero, aun así, ¿cómo no tratar de minimizar al máximo el margen concedido a la fatalidad? Y me temo que la guerra comercial entre las compañías aéreas no favorece precisamente la deseable reducción de ese margen.
¡Un beso!
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